San Lázaro glorioso, en el nombre de Dios,
te pido Lázaro virtuoso en la fe y en la caridad,
que cuando afligido acuda a ti y te invoque,
en mis horas de pena, de dificultades y dolor,
anhelando tu caridad y eficaz protección,
atiendas mis ruegos, te lo suplico por favor.
Querido san Lázaro, bendito y lleno de fe,
por tu gran amor al Señor, por tu entrega y devoción,
si ves que tengo necesidades, que no tengo trabajo,
si sientes que estoy triste y angustiado-a,
dame tu ánimo y consuelo, dame tu auxilio,
no me dejes solo, te suplico por favor.
Escucha esta mi plegaria, mi humilde oración,
y haz que llegue cuanto antes a los oídos del Señor;
y haz que llegue cuanto antes a los oídos del Señor;
bienaventurado san Lázaro de Bethania,
amparo y sostén de tus hermanas Marta y María,
siempre lleno de espíritu de gracia,
hoy acudo a ti con la esperanza, con la ilusión,
de que mi demanda atiendas por tu buen corazón,
y por tu santa mediación se la hagas llegar al Señor:
(di tus problemas y lo que quieres conseguir
con la muy poderosa asistencia de este santo protector).
con la muy poderosa asistencia de este santo protector).
Glorioso san Lázaro, en ti dejo mis problemas,
seguro-a estoy de ser atendido-a por ti
y por ello te doy con afecto mi devoción,
y, con la misma fe que tu hermana
acudió al buen y bondadoso Jesús
y le suplico esperanzada tu resurrección,
y Él, con su misericordia Divina, por su Amor,
sin dudar la concedió,
yo te pido ayuda y protección,
para cualquier momento y ocasión.
También solicito con esta oración,
que por tu poderosa intervención, por tu caridad,
consigas que el Supremo Dispensador,
que es nuestro Padre pleno de infinita generosidad
y fuente viva de toda consolación,
me ayude a alcanzar la perfección
en mi vida cristiana, en mi diario transitar por la vida,
y me guarde de todos los peligros, de los males,
de los enemigos y de cualquier adversidad,
de todo aquello que me pueda lastimar o perjudicar,
de los enemigos y de cualquier adversidad,
de todo aquello que me pueda lastimar o perjudicar,
para que se me muestre despejado
el camino hacia la eterna salvación.
Así sea, así vea cumplida mi petición. +
Reza con devoción el Credo, tres Padrenuestros,
tres Avemarías y tres Glorias.
Por si no recuerdas la oración el CREDO, dice así:
Creo en Dios, Padre Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra.
Creo en Jesucristo, su único Hijo,
Nuestro Señor,
que fue concebido por obra y gracia
Haz la oración y los rezos tres días seguidos, ora con fervor y repítela por la mañana y por la noche, cada día repite tu petición con plena confianza en la muy poderosa mediación de san Lázaro ante el Señor, seguro que no saldrás defraudado-a.
Por si no recuerdas la oración el CREDO, dice así:
Creo en Dios, Padre Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra.
Creo en Jesucristo, su único Hijo,
Nuestro Señor,
que fue concebido por obra y gracia
del Espíritu Santo,
nació de Santa María Virgen,
padeció bajo el poder de Poncio Pilatos,
fue crucificado, muerto y sepultado,
descendió a los infiernos,
al tercer día resucitó de entre los muertos,
subió a los cielos y está sentado a la derecha
de Dios, Padre Todopoderoso.
Desde allí ha de venir a
juzgar a los vivos y a los muertos.
Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica,
la comunión de los santos, el perdón de los pecados,
la resurrección de la carne y la vida eterna.
Amén.
nació de Santa María Virgen,
padeció bajo el poder de Poncio Pilatos,
fue crucificado, muerto y sepultado,
descendió a los infiernos,
al tercer día resucitó de entre los muertos,
subió a los cielos y está sentado a la derecha
de Dios, Padre Todopoderoso.
Desde allí ha de venir a
juzgar a los vivos y a los muertos.
Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica,
la comunión de los santos, el perdón de los pecados,
la resurrección de la carne y la vida eterna.
Amén.
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