¡Oh glorioso San
Juan Bautista de La Salle,
apóstol de la
niñez y de la juventud,
reparte tu gran caridad desde lo alto
del Cielo,
donde gozas por méritos propios y por virtud,
ocúpate de nuestros hijos y de nosotros, sus padres,
ser noble santo, nuestro guía, amigo y
protector.
Intercede por
nosotros, danos tu amparo,
asístenos en esta
vida terrenal,
para que preservados
de toda mancha
de error, de malicia, de odio y de
corrupción,
permanezcamos
fieles a Jesucristo
y a las enseñanzas
del Santo Evangelio.
Oh santo bendito, tú que tanto te
esforzaste
en dar a los niños
más pobres
alimento para el
cuerpo y para el alma,
que quisiste que
el menos favorecido
gozara de
cristiana educación
para que se
afianzaran en el camino de la Verdad,
ayuda a nuestros
hijos, a los niños, a los jóvenes,
muy especialmente
concede tu amparo
y presta tu santa asistencia
a .......
que está pasando por malos momentos
y necesita en su vida este especial favor:
(di el problema y lo que deseas conseguir).
Escucha nuestros
ruegos, señor de La Salle,
atiéndenos en esta
gran dificultad,
no permitas que
quedemos sin solución
para que nuestra vida sea dichosa,
sin preocupaciones ni dificultades que nos apenen.
San Juan Bautista
de La Salle,
educador brillante,
bondadoso y piadoso,
que siempre te ocupaste de dar lo mejor de ti
a los niños y a los jóvenes
concede a nuestros
hijos tu protección,
que no pasen por
tribulaciones,
que no tengan
necesidades,
que la justicia impere
a su alrededor
y que puedan
recibir la mejor educación,
para que puedan
encontrar un buen empleo;
aléjalos de malas compañías,
de vicios,
dependencias y enemigos;
haz que sean
generosos y sinceros
y que no se alejen
del camino del bien.
Santo señor de la
Salle, también os pedimos
que ejercitándonos
en las virtudes
en que fuisteis
tan admirable ejemplo,
todos merezcamos ser
participantes de la gloria
que ahora gozáis
en la Patria Celestial.
Amén.
ORACIÓN ESCRITA POR
SN JUAN BAUTISTA DE LA SALLE
Oh Dios mío, te pido me concedas
vivir en paz con mi prójimo,
porque no puedo gozar de tu favor
si no vivo en unión
con mis hermanos y hermanas.
Puedo perseverar en esta unión
con mansedumbre y paciencia.
Dame, entonces te suplico,
estas dos virtudes,
y permite que siempre hable y actué
amablemente con todos;
pacientemente sufra por amor a Ti,
cualquier injuria o insulto
que se me haga injustamente,
que no me enoje u ofenda
sino que pacientemente sufra todo
lo que me suceda por otro. Amén.
Reza con mucha devoción tres Padrenuestros,
tres Avemarías y tres Glorias.
Repetir las oraciones y los rezos tres días seguidos.
0 comentarios:
Publicar un comentario