ORACION AL MILAGROSO SANTO NIÑO DEL REMEDIO PARA PETICIONES URGENTES

Dulcísimo Niño Jesús, 

que a cada instante nos honras con tu Amor, 

que eres Luz y Vida, consuelo y esperanza nuestra 

Tú que nuestros males con bondad remedias,

despierta en nuestras almas 

el arrepentimiento sincero de las culpas, 

aumenta nuestra fe y confianza 

y haz que seamos sumisos a tu adorable voluntad. 

 

Danos el pan cotidiano y el trabajo que nos falta, 

sana nuestras enfermedades, 

consuélanos en las penas que nos embargan. 

Amado Niño, otórganos la resignación necesaria 

para sufrirlas con paciencia y siempre confiar en Ti, 

y haz benignísimo Niño del Remedio, 

que seamos dóciles a tu gracia 

y no nos falte la humildad de corazón. 

Oh Jesús amable, Jesús admirable,

que por nuestro amor te hiciste Niño; 

dándote el Padre Celestial 

un Nombre sobre todo nombre, 

te adoramos y reverenciamos en esta Santa Imagen, 

desde donde nos haces llegar tus beneficios, 

y, con todo nuestro ser queremos decirte 

que te amamos sin cesar y con todo corazón 

y queremos servirte con fidelidad.  

Hoy te invocamos con fervorosa confianza 

y acudimos ante Ti llenos de confianza 

para conseguir ser aliviados en nuestras adversidades 

y pedirte que nos otorgues 

toda clase de bienes espirituales y temporales. 

En tus divinas manitas ponemos nuestras carencias, 

nuestros graves problemas financieros, 

sabes que aunque lo hemos intentado 

no conseguimos salir por nuestros medios 

de tanta necesidad y agobio económico, 

por ello te rogamos, te suplicamos fervientemente 

nos hagas llegar lo antes posible 

el remedio que nos hace falta 

para salir de nuestras ruinas y miserias, 

en especial depositamos ante Ti nuestro problema 

y te pedimos encarecidamente nos ayudes 

enviándonos un milagro que lo solucione: 

(pedir ahora lo que se desea conseguir)

Niño bendito, óyenos, escúchanos, 

Tú que eres remedio universal para todos los males, 

Tú que eres nuestro consuelo y nuestro gozo, 

haz que recibamos en breve tu Divino Amor, 

da alegría a nuestros corazones 

y otórganos lo que con ilusión hemos solicitado. 

Jesús mío, Jesús mío, misericordia, 

por tu inmensa misericordia, bendícenos. 

Así sea. Así se cumpla.  

Santo Niño del Remedio, 

dulce emblema de ternura 

encanto del alma mía 

mi amor, mi bien, mi ventura. 

Remedia todos mis males, 

atiende mis peticiones, 

consuela todas mis penas, 

escucha mis oraciones. 

En tanto que, reverente, 

Niño Divino y Glorioso, 

te digo con mi alma y vida: 

te saludo Niño hermoso. 

Llego hasta esta tu santa Imagen 

buscando tus milagros, 

Tú que a tantos auxilio ofreces, 

llena mi vida de felicidad 

y concédeme este inmenso favor: 

(repetir con mucha fe la petición). 

Santo Niño del Remedio, 

da remedio a mis males 

y recíbeme en tu dulce corazón, 

pon tus manos en mi vida 

y dame tu santa bendición. 

Así sea. + 

Rezar trece Padrenuestros. 

Hacer la oración y los rezos tres días seguidos, 

o trece si la petición es muy difícil y urgente.

El Santo niño del Remedio es muy, muy milagroso.

Su imagen es una de las más veneradas por la inmensa cantidad de favores y gracias concedidos. 

Su fiesta se celebra el 13 de enero, por ello, los días trece de cada mes cientos de devotos acuden a besar su pie, rezarle piadosamente y le llevan sus problemas con muchísima fe, se acercan a Él para hacerle todo tipo de peticiones, para que remedie urgente sus necesidades, males y aflicciones, y, sobre todo, a solicitar su protección en toda enfermedad, carencia y adversidad.