¡Oh Santa Gema, qué grande era tu amor
por los pobres, los enfermos y los pecadores,
qué grande tu empeño en ayudarlos!
por los pobres, los enfermos y los pecadores,
qué grande tu empeño en ayudarlos!
Te ruego ahora, ven en mi ayuda,
también yo soy pobre, soy pecador-a
¡por favor, ayúdame también a mí!
también yo soy pobre, soy pecador-a
¡por favor, ayúdame también a mí!
que estoy sufriendo por no poder solucionar
las dificultades y problemas que me afligen.