San Roque bienaventurado,
que con tus obras nos diste ejemplo
de dedicación y compasión a los enfermos,
a los pobres, los carentes de medios y necesitados,
que te entregaste a los mas desventurados
y no dejaste de dar caridad a los abandonados
como encarnación
del consuelo
de la infinita y gran misericordia divina,
mereciendo el
prestigio sobrenatural de lo milagroso.