Mírame,
¡oh mi amado y buen Jesús!,
Pastor
amoroso de las almas,
postrado
ante tu Santísima presencia
te
ruego que colmes mi alma
con la Luz de Tu divino
Espíritu;
Jesús
Buen Pastor que siempre velas por guardarme
me
encomiendo a tu bondad y misericordia
y
te pido humildemente perdón
por mis pecados y deficiencias.