Oh, Padre Celestial, Dios Santo,
te damos gracias y te alabamos de corazón
por el grande amor y por toda la misericordia
que has manifestado hacia nosotros,
y alabo tu nombre en las bendiciones recibidas
y por las que aún me quedan por recibir.
Señor, por Tu infinito poder y virtudes,
y por los merecimientos de la pasión y muerte
de Tu glorioso Hijo, te suplico me des tu auxilio.