¡Oh bienaventurada y amable santa Lucía!,
gloriosa santa universalmente reconocida
por todo el mundo por tus innumerables milagros,
por ser nuestra especial y poderosa abogada de la vista,
por ser nuestra especial y poderosa abogada de la vista,
gran protectora de los niños
y auxilio de las familias con problemas económicos.
Tu que estás llena de caridad y con amor nos ayudas,
escucha nuestras peticiones,
a ti clamamos en nuestras tribulaciones
y con esperanza te pedimos uses tu generosidad
y hagas que nuestra vida mejore.
y auxilio de las familias con problemas económicos.
Tu que estás llena de caridad y con amor nos ayudas,
escucha nuestras peticiones,
a ti clamamos en nuestras tribulaciones
y con esperanza te pedimos uses tu generosidad
y hagas que nuestra vida mejore.
Hoy llenos de confianza a ti acudimos
pidiéndote el inmenso favor
de que la nuestra vista se mantenga sana
de que la nuestra vista se mantenga sana
y que el uso que hagamos de nuestros ojos
sea siempre para bien de nuestra alma,
sin que turben jamás nuestra mente
objetos o espectáculos peligrosos,
y que todo lo sagrado o religioso que ellos vean
se convierta en saludable
y valioso motivo de amar cada día más
se convierta en saludable
y valioso motivo de amar cada día más
a nuestro Creador y Redentor Jesucristo,
a quien, por tu intercesión,
¡oh protectora nuestra!,
esperamos ver y amar eternamente
en la patria Celestial.
Santa Lucia virgen y mártir, santa virtuosa,
te imploro con humildad la protección de mi familia,
líbranos de todo mal, peligro y enfermedad,
aleja de nosotros las carencias y las aflicciones.
Por favor santa amada, siempre fiel y abnegada,
tú que tanto haces por los que a ti claman
auxílianos en esta difícil situación que nos agobia
y sácanos de los problemas por los que pasamos.
Santa Lucía, dulce servidora del Señor,
estoy seguro-a que no dejarás que suframos más
y mediante tu poderosa y milagrosa intercesión
nuestro Señor Jesucristo
nos conseguirá lo que tanto deseamos
y que nos es necesario para salir de lo que nos aflige:
(hacer con gran fe la petición).
esperamos ver y amar eternamente
en la patria Celestial.
Santa Lucia virgen y mártir, santa virtuosa,
te imploro con humildad la protección de mi familia,
líbranos de todo mal, peligro y enfermedad,
aleja de nosotros las carencias y las aflicciones.
Por favor santa amada, siempre fiel y abnegada,
tú que tanto haces por los que a ti claman
auxílianos en esta difícil situación que nos agobia
y sácanos de los problemas por los que pasamos.
Santa Lucía, dulce servidora del Señor,
estoy seguro-a que no dejarás que suframos más
y mediante tu poderosa y milagrosa intercesión
nuestro Señor Jesucristo
nos conseguirá lo que tanto deseamos
y que nos es necesario para salir de lo que nos aflige:
(hacer con gran fe la petición).
En tus manos dejamos nuestras súplicas,
Rezar fervorosamente el Credo y tres Padrenuestros.
Repetir la oración y los rezos tres días seguidos.
BREVE BIOGRAFÍA
Santa Lucia de
Siracusa, virgen y mártir
(Italia, 283-304).
confiando que las harás llegar a las Alturas
y que con presteza seremos atendidos
si es para mayor gloria de Dios,
y que con presteza seremos atendidos
si es para mayor gloria de Dios,
honor tuyo y bien de
nuestras almas.
Amén. +(Italia, 283-304).
Esta aclamada y conocida santa, hija de padres nobles y ricos, fue educada con esmero en la
fe cristiana. Desde muy niña se consagro a Jesús e hizo voto perpetuo de
virginidad. Vivió en la época de las persecuciones y sufrió duros tormentos cuando
el joven pagano con el que tenía que haberse casado la denunció por ser
cristiana. La encarcelaron y condenaron.
Al no renunciar a su fe quisieron
llevarla a los barrios marginales para que perdiera su virginidad y se dedicara a la
prostitución, pero Dios no lo permitió obrando el milagro de que permaneciera
rígida y pesada como una gran roca y no pudiera ser movida ni tocada por sus captores.
Condenada a ser
quemada, desapareció envuelta en las llamas, pero cuando se apagaron, Lucia no
había sido dañada por ellas. Murió decapitada, y según la leyenda, después de
haberle sido extraídos los ojos.
Patrona de los niños, (sobre todo los que sufren abandonos, tienen necesidades o están enfermos), de los ojos, de la vista, de los invidentes,
de los oftalmólogos, de los fotógrafos, modistas y sastres, trabajadores del
cristal, agricultores, vendedores, escritores. Se la invoca para protección en general, y se acude a ella en las dificultades económicas, especial refugio y eficaz auxilio de los niños, de los problemas relacionados con la visión, en las hemorragias, infecciones de garganta y pulmones, disentería...
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